Este mantra me lo enseñaron hace años en un lugar bien remoto de mi realidad actual. “Universo, concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, amor para cambiar las que sí puede y sabiduría para reconocer la diferencia”.
Hola aliens. Llega una nueva semana y la presencia de planetas personales en signos de fuego intensifica la necesidad de reconocer el justo medio para poder canalizar la energía de una manera provechosa. En este momento el Sol y Mercurio transitan Leo. Mercurio perfecciona una cuadratura a Urano en Tauro (lunes 10) quien empezará su retrogradación el viernes 15. Marte continúa dando bocados de su enérgico tránsito por Aries, la semana pasada fue el turno de la cuadratura con Júpiter Rx en Capricornio, esta semana le corresponde a Plutón Rx (jueves 13) y un trígono al Sol el domingo 16.
El Sol en Leo clama por actuar desde el corazón, la autenticidad del amor y reconocer quiénes somos. Es importante que cada acción venga desde un deseo por brillar genuinamente y no por robarnos el show. Sé que pulula caliente la fuerza de hacer un cambio real, el tema es cómo hacerlo sin hacer tanto reguero. En este camino podemos encontrar partes de nosotros que desconocíamos. La excéntrica. La lanzada. El justiciero. El impulsivo. La pregunta es cómo lo estamos haciendo. ¿Qué tanto vigilamos nuestras formas y lo que proyectamos? ¿Qué tipo de luz estamos enviando, cómo estamos brillando? Porque aliens, no todas las diferencias merecen volverse un conflicto. Y no todos los conflictos merecen llegar hasta el drama del show con escenario incluido. La llamada de esta semana es al auto conocimiento y el auto control, recordar nuestro fuego y saber usarlo, el fuego y la agitación mental que no crean destruyen.
Marte, Urano y Plutón hablan de acción, transformación, fuerza, poder, cambios, confianza, originalidad y liberación. Si aún no conocen a su Marte, Urano y Plutón natal esta semana es la excusa perfecta para hacerlo. La posición por signo, casa y aspectos en la Carta Natal de cada uno habla de la forma que cada quien tiene de regular la energía de cada planeta en su vida. No todos quemamos energía de la misma forma, unos necesitamos actividad física fuerte, otros un libro, otros dormir. Unos se liberan a través del sexo, otros a través de la cocina, otros con amigos. El autoconocimiento es lo que nos permite entender cómo operan estas fuerzas en nosotros y saber usarlas, somos únicos (Sol en Leo) porque tenemos formas distintas de regular la energía.
Marte en Aries activando las zonas Capricornio y Cáncer ya nos ha dado probadas de las consecuencias de no canalizar acertadamente la energía. Acciones apresuradas, violencia, desconsideración y explosividad innecesaria. En cuadratura, canalizar la energía de estos planetas es un reto, seguramente estaremos ante situaciones que probarán nuestra capacidad para reconocer la diferencia, saber qué merece inversión de energía y cómo hacerlo sin quemar la casa. ¿Cuáles son nuestras revoluciones y cómo nos abanderamos por ellas, rebeldes sin causa o con intelectualidad rebelde? ¿Cómo lideramos causas, a través de la agresividad o el pacifismo? ¿Cómo nos gestionamos ante la provocación, más violencia o ecuanimidad? Cómo sucede con los aspectos de tensión -a excepción del trígono Sol - Marte del domingo que es fuego creador-, hablamos de energías poderosas que pueden convertirse en grandes habilidades. Volcar la excitación mental hacia ideas originales que tenemos en el cajón, ser francos y desarrollar una profunda asertividad, transformar situaciones de manipulación sin entrar en juegos de poder donde podamos destruirnos y destruir a otros. Siempre he dicho que ante la provocación, la manipulación y el conflicto inminente -sobre todo ante algo que ni siquiera nos importa o mueve- siempre está la posibilidad de quedarse y escupir fuego o huir y usar ese fuego creativamente, por eso reconocer la diferencia es clave, qué mueve realmente el corazón para decidir desde ahí.
Sin duda las lecciones de esta semana serán escuchar el corazón para actuar desde el amor, aprender a reconocer la diferencia entre cada situación y cómo gestionarnos ante ellas, al final, ese es el gran poder, siempre podemos elegir cómo asumimos la vida.
Aire y más aire para cuando se nos olvide respirar, los números infinitos para cuando se nos olvide contar y pasos fuertes y largos para esquivar proyectiles y escapar.
Avanti.
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