¿Qué es de la vida si se anda a pasos de desconfianza? Como si uno no fuera capaz o los milagros solo les pasan a unos pocos. Pues te digo que estás llamado a expandirte como quieras y las veces que quieras hacerlo. Mientras escribo esta hoja de vuelo semanal el Sol se eclipsa con fuerza. Todas las Lunas Nuevas abren ciclos emocionales, pero esta de hoy, por ser eclipse total del Sol en el 23° de Sagitario, lo es más. ¿Hacia dónde quieres moverte? ¿Cómo te imaginas expandiéndote? Pues acá el tema es que te lo creas y le pongas fe. Y puede que descubras en la fe y el hecho de hacerla parte de tu vida una verdad universal. De eso se trata un poco este eclipse.
Tómate este eclipse de Luna Nueva en Sagitario como la apertura hacia una nueva forma de entender la vida y sus misterios. Indaga en filosofía. Ábrete a viajar, conocer de otras culturas y formas de pensar. Como el Nodo Norte está en Géminis considera la lectura, el matricularte en un curso o aprender idiomas como otras de las tantísimas formas de viajar, abrir la mente y expandir la conciencia. Júpiter, el gran Zeus dios del Olimpo y su padre el Cronos, Saturno, protegen con laurel tus fechas. Antes de entrar en Acuario, ambos armonizan con Venus quien está por entrar en tierras de aventura, Sagitario. Haz acuerdos conscientes con lo que quieres y si quieres, tómatelo como un compromiso afectivo/espiritual adulto (Venus – Saturno), un salto de fe y optimismo para atraer lo que deseas a largo plazo (Venus - Júpiter). Conecta con tu energía mental y el lado combativo de tu inteligencia (Mercurio trígono Marte), te vas a ir dando cuenta que esta última es la que te va a acercar tus flechas justo donde las quieres poner.
No es solamente la energía de eclipse la que estamos experimentando, estamos ad portas de un gran cambio colectivo del que ya este 2020 hemos probado bocado. Esta misma semana mientras Luna y Sol se unen en Sagitario, Júpiter (domingo 19) y Saturno (viernes 17, que es la Saturnalia, la fiesta romana en honor al dios Saturno) hacen su ingreso en Acuario, hecho que configurará la Gran Conjunción la próxima semana, el 21 de diciembre, justo con el solsticio de Capricornio.
Hemos pasado la página, por más que intentemos afanosamente ‘volver a la normalidad’ esto no sucederá. La vida que conocíamos amaina lenta, pero contundente. A Júpiter y Saturno les toma casi veinte años encontrarse, es decir, hacer conjunción. La última vez que lo hicieron fue en Tauro, primer signo de tierra. Las últimas diez conjunciones que Júpiter y Saturo se han dado en signos de Tierra. Tiene que transcurrir 200 años para que la siguiente conjunción se dé en un elemento diferente. La conjunción Júpiter - Saturno de este 2020 se da en 0° de Acuario. ¡Eureka diría Urano! Esto quiere decir que han pasado 200 años desde que se encontraron en un signo de aire. Te presento la Gran Mutación, bienvenida(o) oficialmente a la era de Acuario –y eso que nos falta la entrada de Plutón en Acuario en el 2024 pero no me adelanto-. Estamos acabando un ciclo de 200 años que se inició aproximadamente en 1802 y que coincidió con la Revolución Industrial –¿Ahora sí entiendes la primacía del utilitarismo y la materia de estos dos siglos? -.
Una conjunción cada veinte años trae cambios importantes de acuerdo al signo donde se vienen dando las últimas conjunciones. Esta, al iniciar un ciclo tanto de veinte como de 200 años supone un cambio vibracional psico-social profundo. Además, la última vez que Júpiter y Saturno se encontraron en Acuario fue hacia 1405. Carl Jung fue el primero en acotar la expresión inconsciente colectivo –y por esto tuvo sus diferencias con Freud-. Jung define el inconsciente colectivo como el recipiente de memorias ancestrales que se va alimentando a partir de las vivencias y pensamientos de dicho colectivo. La entrada de Júpiter y Saturno en Acuario supone un cambio en la forma como entendemos el colectivo –y es que no hay palabra más acuariana que esta- y la responsabilidad del papel que jugamos en él. Todos los acontecimientos que venimos experimentando este 2020 y que estamos por vivir sugieren un cambio de chip en cuanto a la forma como nos concebimos dentro de esta maya y la forma cómo la concebimos a ella.
Por eso te insto a que abras tu mente. No hay límites que tú no contemples, solo los de tu mente. Has pisado el acelerador. Te lanzaste a vivir este momento único y tal vez lejanamente irrepetible. Disfrútalo. Hazlo en grande. Y por sobre todas las cosas ¡Cree en ti!
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Te amo semilla.
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