top of page
La Concha

Starpath agosto 5 – 11. A manos llenas


"Nada me ha sido negado

Porque de oro mis manos están hechas.

El agua turbia que un día se escapó

Regresa brillante a mí con más fuerza".

-La Concha-

Para poder recibir hay que tener los brazos abiertos y las manos libres. Esta semana es de activar y empezar a recibir. ¿Recuerda que en starpath anteriores decía que agosto sería como un bálsamo luego de la temporada de eclipses? Bueno, acá viene la primera gota.

La semana se abre sin aspectos importantes, la luna transitando el signo de Libra durante el lunes estimula la necesidad de contacto social. No es una luna muy emocional pero si cortés y diplomática.

Y el protagonista de esta semana es nada y nada menos que el gran Zeus quien después de estar cuatro meses en slow mode, vuelve a paso normal el domingo 11. No hay que esperar hasta el domingo para palparlo, su onda expansiva y protectora empieza a sentirse desde el miércoles 7 y jueves 8 cuando perfeccione trígonos con Sol y Venus, respectivamente.

Cuando Júpiter anda de buenas se ve y siente de inmediato. No es que empiecen a caer diamantes del cielo, o que los problemas se solucionan como por arte de magia, la energía Júpiter es macro, es tan benevolente y optimista que siempre logra expandirse desde cualquier situación. El tema con Júpiter es que su onda propicia espacios para que todos crezcan, como cuando uno tira la pirinola y todos ganan. Durante su retrogradación, la misión era descubrir cuál era la verdad de cada quien. Sí, uno quiere crecer y expandirse pero ¿a costa de qué? ¿Cuáles son las verdades con las que uno se casa y las que motivan el accionar? Sí, uno va detrás de ‘su verdad’ pero, en el fondo, ¿esa es mi verdad? Fueron cuatro meses para indagar sobre las creencias, el significado de crecer y expandirse, y entender que no toda expansión es evolución. Ahora que entra en modo directo la expansión es real, además, ¡es cuarto creciente! Sí, cuarto creciente en Escorpio, ya se sabe que esta luna es profunda y le gusta ir al fondo de todo, aproveche el modo inquisidor de esta lunación, sumado a los trígonos de Júpiter con Sol y Venus, para entender a profundidad lo que empieza a expandirse. Estos tránsitos son de fiesta tanto allá arriba como acá abajo. El que está enfermo se cura más fácil, las relaciones mejoran notoriamente, el letargo de los eclipses se desvanece frente al entusiasmo que genera ver como la energía sube.

El domingo 11 irrumpe con dos aspectos, además del final de la retrogradación de Júpiter. Mercurio, quien ya anda a velocidad normal, vuelve a Leo. Mercurio empezó su pasada retrogradación en Leo así que las ideas llamativas tuvieron que esperar un poco o no tuvieron la acogida que uno esperaba. Ahora está directo y de vuelta en Leo, las palabras ahora sí suenan con más fuerza. La teoría tradicional dice que Mercurio en Leo está en una especie de caída, lo que pasa es que acá la comunicación es efervescente, se trata de impresionar y llamar la atención. Dirán que este Mercurio le gusta ser el centro de la reunión mientras proclama un potente discurso, a mí me gusta pensar en un Mercurio que brilla por su autenticidad mental y por la forma como inspira lo mismo en otros. Son esas conversaciones enérgicas e inspiradoras de donde salen agallas para decir lo que uno piensa, son las palabras que animan a otros a mostrarse con autenticidad, son esas ideas originales que hablan desde lo profundo del corazón. Con Mercurio en Leo uno aprende a confiar en sus propias ideas y a mostrarlas con seguridad. Al estar en un signo fijo, Mercurio acá es capaz de vibrar con mucha concentración y fuerza de voluntad. Como le gusta pensar en grande, muchas veces se le escapan detalles importantes, hay que vigilar caer en el dogmatismo. Este tránsito, más la energía del Sol en Leo, potencia la capacidad de liderar y ejecutar, ¡proponga y haga!

Entrada la tarde del domingo, en el 6º de Tauro, Urano inicia sus 152 días de retrogradación, que finalizarán el 11 de enero del 2020. Pese a que el tránsito de Urano un Tauro empezó en el 2018 y terminará en el 2026, sus efectos se han ido sintiendo paulatinamente. La relación con el dinero, el valor que se le da al confort y el placer, fluctuaciones financieras, cambios repentinos en los sistemas económicos, alteraciones políticas y sociales, todos estos han sido y serán piedras angulares de este tránsito. Con este nuevo ciclo de retrogradación, Urano replanteará la escala de valores personal y colectiva –el valor físico del dinero, el valor mental de la satisfacción, el valor emocional del amor, el valor espiritual del bienestar-, creando un nuevo enfoque dentro de la perseverancia de Tauro. El papel de la tecnología en el desarrollo de las finanzas globales también será un tema para revisar. Urano es un planeta transpersonal, sus efectos son tanto personales como colectivos. En su movimiento retrógrado, no solo trata de revolucionar y liberar esa área Tauro de la carta personal que uno da por sentada, trata también de utilizar el ingenio y la capacidad de innovación a nivel colectivo para ser partícipe de una alineación con un sistema global más equilibrado. El uso, equilibrado o desproporcionado, del dinero tendrá efectos más palpables durante este período; las verdaderas intenciones en la administración de recursos, personales y colectivos, serán desempolvadas por el efecto emancipador de Urano. Si usted ya ha sentido cambios arrasadores en la zona Tauro de su carta natal, espérelos con más radicalismo durante este tránsito.

Avanti aliens, los dioses están de fiesta y reparten regalos a quienes abran los brazos.

29 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page