Qué bien vienen los cambios de perspectiva y con ellos, los de ánimo. Esta semana los planetas se mueven y abren un ciclo nuevo que respira diferente, Venus llega a Piscis para dar una probadita de lo que significa amar sin esperar nada a cambio, Mercurio termina su retrogradación y Marte entra al dual Géminis lo que significa que abril viene diferente y con fuerza.
¿Cree en las almas gemelas? Y no, no estoy hablando de alma alcahueta, esa que se aguanta todo ‘en nombre del amor’, hablo de amor elevado, místico que raya en lo mágico, ese que hace que uno quiera ser mejor persona, amor con MAYÚSCULA y sostenida. Si nunca ha conocido a alguien que tenga en su carta a Venus en Piscis pues deseo que le suceda, el amor con estas personas es como viajar en una nube, es un amor tan desinteresado que llega a perder la noción de realidad. El tránsito de Venus en Piscis es un ciclo del año para dar lo mejor de uno, un amor filántropo e idealista pero que pisa sobre tierra, el que ama con amor propio y comparte con todo aquel que lo necesita. No es una tarea fácil, el amor de esta Venus no conoce límites, para ella amar se trata de encontrar un alma gemela con quien pueda fundirse y perderse en otro mundo. Pero así como ama también se desilusiona, tiene la tarea de aprender a ver a las personas como son y no como le gustaría que fueran. Venus en Piscis tiene un corazón gigante, caben en él todos los habitantes del planeta, el problema es cuando da ese amor esperando recibirlo igual que como lo brinda, entonces amar ya no es tan divertido porque se desengaña y sufre, termina lastimada por idealizarlo todo.
Acabó de pasar la primera de las dos lunas llenas que se darán en Libra así que el tema de las relaciones sigue encendido, cómo mantener la balanza equilibrada entre lo que uno es y respetarlo, y lo que es el otro y también respetarlo; dar amor porque nace y uno está completo o por boronas de afecto; amar con lentes de película 3D o amar con los pies en la suelo, intentar cambiar a papá y mamá o enamorarse y agradecer por lo que tienen para dar, aceptarlos como son. Algunas relaciones existentes están tocando puntos karmáticamente sensibles ahora, rastros de abandono materno o paterno que aparecen, alguien que llega para recodar cómo es amar con magia realista o con caos fantasioso, almas gemelas que llegan para mostrar una nueva forma de amor o una forma de amor de la que uno ya se hartó.
Todo puede suceder, la certeza del azar de la mecánica cuántica, el sextil entre esta mágica Venus y Urano en Tauro –el otro reino de Venus- puede traer sorpresas afectivas e incluso monetarias, incluso cuando no se busca se encuentra, solo hay que abrir la cartera y el corazón para recibir y si nace, pintar una pared para decir te amo. El cambio de velocidad se siente, esta semana Mercurio sale de su fase retrógrada en Piscis, ahí dio muchas lecciones sobre el peor caos que puede existir, el que se lleva con uno mismo allá en el inconsciente. Mercurio arranca directo el jueves 28 de marzo en el 16º de Piscis –el jueves y viernes son los días de más cuidado con este tránsito- pero solo hasta el 5 o 6 d abril se puede decir que empieza a andar a velocidad normal, ¿consejo? Espere un poco más.
El Sol ya entrado en Aries está pidiendo acción, Marte entra en Géminis el domingo 31 pidiéndole acción pero al intelecto. Mercurio retrógrado en Piscis mantuvo en stand by temas de viajes, estudios, compras y contratos, con la llegada de Marte a los territorios de Mercurio la energía se equilibra pero calma, cuidado con la impaciencia. Cuando Marte entra en Géminis la mente se despierta y se vuelve crítica, le gusta hablar franco aunque a veces se le va la mano con tanta franqueza, es una lengua aguda con tendencia a volverse cáustica. Sí, es de actuar rápido, tiene tantas ideas que se desespera por ponerlas todas en marcha, una de las lecciones de este Marte es aprender a dosificar su energía para no dispersarla y quemarse rápido. Mucho cuidado con las promesas que se hacen con Marte en Géminis, si se metió en algo hay que terminarlo, por eso la clave está en regular la energía y usarla adecuadamente, si está que se desborda en palabras y entusiasmo mejor vaya a la universidad a averiguar por el curso o llame a la agencia de viajes y pregunte por el tiquete, aproveche que Mercurio le está dando vía para que retome despacio.
Tratándose de la mitad de un ciclo entre dos lunas llenas en Libra, cuarto menguante en Capricornio el jueves 28 –que tiende a abrumarse por sus propios miedos e inseguridades-, Venus recién entrado en Piscis con Mercurio despertando a su lado, y un Marte llegando a Géminis hay que ir despertando poco a poco y firmando con calma, deje que la oruga se vuelva crisálida y la crisálida en mariposa paso a paso.
Avanti spacers.