Y llega un nuevo ciclo, en la noche de ayer los Nodos lunares cambiaron de posición, el nodo norte y el nodo sur abandonaron el axis Virgo – Piscis para ocupar los signos Leo – Acuario. Para empezar a hablar sobre las implicaciones de este cambio es preciso recordar qué son los nodos lunares.
Partamos de la premisa que pisamos este lugar en repetidas ocasiones, estamos acá obedeciendo a una voluntad divina, un ciclo de evolución que una y otra vez nos pone aquí y ahora. Cada proceso y cada vida vienen con sus tareas y con su mambo, venimos a transformarnos pero antes tendremos que liberarnos, para que eso que está destinado a llegar llegue hay que dejar algo, lastres y maletas antiguas, un pasado no tan inmediato, de una vida o vidas pasadas, es más bien lejano pero aún latente.
Cuando hablamos de Nodos Lunares nos referimos a los puntos donde la órbita de la Luna alrededor de la Tierra intersectan la órbita de la Tierra alrededor del Sol. El Nodo Sur hace referencia a esa vía ancestral que tanto sabemos recorrer, aquello que se volvió tan familiar que representa todo un reto abandonarlo y transformarlo para conseguir lo que el Nodo Norte tiene para nosotros, nuestra misión en esta vida, el siguiente peldaño en el camino evolutivo, lo que vinimos a hacer y ser una vez hayamos dejado el antiguo empaque.
El día de ayer los Nodos cambiaron de ubicación, han entrado al axis Leo – Acuario y estarán ahí durante aproximadamente 18 meses (es lo que tardan los nodos estacionados en cada eje).
La dialéctica kármica, los Nodos
El Nodo Norte le pide al individuo que se sitúe en una dirección particular indicada por el signo y la casa que éste ocupa. Acá el nodo señalará cualidades, facultades y aspiraciones que son totalmente nuevas y por ello exigen un nivel de esfuerzo mayor, consiente y sostenido para ser alcanzadas. Las energías encaminadas a construir este camino que propone el Nodo Norte constituirán el poder espiritual del ser y su capacidad para vivir la vida de manera reveladora, una manera muy personal pero que dignificará.
El Nodo Sur simboliza el camino conocido, según el signo y la casa dónde éste se encuentre define los patrones que ya se construyeron en el pasado, estos no tienen por qué ser nocivos ni satanizados, simplemente son vías que ya no representan ningún crecimiento para el ser por ser ya tan transitadas; el camino fácil funciona, por ahí también se puede llegar pero no trae consigo el aprendizaje de recorrer lo nuevo, lo que representa un reto.
Los nodos Virgo Norte – Piscis Sur nos enseñaron el valor de transitar la milla extra, a trabajar con esfuerzo, concentración y dedicación (Nodo norte en Virgo), darlo todo en pro de convertir los sueños en realidad. La procastinación, la pereza, la autocomplacencia y la falta de iniciativa (nodo Sur en Piscis) debilitan el paso de la evolución, era necesario crear conciencia de que la vida que queremos está a una decisión de distancia, hay que aprender a caerse y a levantarse, a darlo todo por aquello que el alma descubrió la hace vibrar, conjugar el talento y las ganas con la disciplina y la constancia. No es un camino fácil pero en la medida en que se va transitando se va haciendo emocionante el andar y va cobrando valor, vale la pena hacerlo.
Just be yourself, Nodo Norte Leo – Nodo Sur Acuario
Pues bien, ahora el Nodo Norte se establece en el signo del león, el rey, el signo del brillo personal por excelencia, Leo. Leo y el Sol están estrechamente relacionados con el corazón. El Sol es el centro del sistema y el corazón el centro del ser humano. El corazón y el amor -se sabe de siempre- son dos conceptos inconmovibles, están unidos. Para entender lo que Leo significa no se puede olvidar en ningún momento la relación Sol-Centro-Corazón-Amor.
Leo es el niño que vibra al unísono de su dios interno, el creador que responde siempre al deseo del corazón, crea la realidad del sistema al que pertenece, seas cual sea, crea su propia individualidad. Leo es el segundo signo de la cuadruplicidad fija, y también el segundo signo de la trilogía del Fuego. Conseguir que simpatice lo fijo y estable con la expansividad y resplandor del elemento Fuego es como conseguir la unión de la potencia solar y la condición humana.
El Nodo Norte en leo es la puerta de entrada del niño siendo lo que quiere ser, tomando como punto de referencia todo lo aprendido acerca de sus talentos y debilidades. Vibrar al ritmo del corazón es vibrar con nuestras virtudes para ponerlas al servicio del bien mayor, es decidirse a involucrarse en un acto de amor, el de brillar por lo que uno es realmente. Sin embargo, montarse en este tren no es sencillo, el nodo Sur en Acuario marca una tendencia a descansar en los pastizales donde se evade la responsabilidad de desarrollar el propio material creativo. A este nodo le gusta idealizar al grupo, prefiere enfrascarse en problemas intelectuales (Acuario es un signo de Aire) para así hacer caso omiso a los dictámenes del corazón. En este eje nodal se manejan dos conceptos fundamentales, la autoconsciencia y la conciencia de grupo. No es posible ser en el grupo si no se es desde lo personal, si no está claro lo que se puede dar desde el corazón la colectividad no fluye, es la dialéctica dónde el grupo y la humanidad necesitan seres construidos desde la autenticidad del corazón.
Durante los próximos meses se hará mucho más visible la necesidad de despegarnos un poco de la comunidad como concepto macro para poder vibrar desde la propia esencia, sin colorantes ni etiquetas, solo ser lo que se es. Somos lo que comemos, la música que escuchamos, lo que leemos, las personas que permitimos que estén en nuestra vida, cada cosa que hacemos nos define, la mirada durante los próximos 18 meses se volcará a descubrir la manera de exteriorizar todo lo que constituye nuestra propia identidad, para pertenecer a la sociedad debemos pertenecernos a nosotros mismo, antes de pertenecer al macrocosmos debemos ser parte de nosotros mismos, integrar el cosmos que habita adentro de cada quien, ‘as above so below’.
Les envío mucho amor para ser desde el corazón, mucho coraje para pararse ante el mundo, mucha determinación para transitar nuevos caminos y muchos colores para atreverse a pintarse de una forma nueva y totalmente diferente. Qué viva el cambio, qué viva lo que transforme, qué viva lo que haga trascender el ser. Avanti leones.